Harry Potter: a caballo entre la Muerte y la Reliquia
El día a día como sucesiva permutación de circos. Son las cinco, nueve minutos sobre el doble cero del minutero. Apenas algo más de una hora para el gran acontecimiento. Suerte que ya no pertenezco al gremio de los libreros. Tengo el invierno atragantado desde hace días en algún tramo del esófago. Yo soy el gato y él la bola de pelo. Alguien me ha dicho esta mañana sin venir a cuento que en esta séptima, última con suerte, de la saga, Harry Potter, el estudiante cum laude de la Licenciatura en magias y supercherías, "moría pero no moría". ¿Cómo diantre se come eso?
Vivo sin vivir en mí
de lo lento que pasa el tiempo
todavía sesenta minutos para las seis y media
-2008 21 de febrero-
tan altas son las ventas que espero
que sólo de pensar en los dividendos
me da el pasmo el squirt el jamacuco
me diluyo en lúbricos sueños de dinero
me corro y me recorro que es un gusto
y de tanto correrme y sentir quieto el segundero
muero porque no muero
Santa Teresa de Rowling
Yo soy multimillonaria y vosotros estáis muertos
Mientras tanto, anda circulando por ahí un gran libro, entre las sombras, los fantasmas, los fantoches, tanta payasada. Se titula "¿Quién nos cortará las uñas cuando hayamos muerto?", de un tal Ferrán Barber. Allá cada cuál con lo que se lleva a la cama...
9 comentarios
nacho -
CHIU -
Samuel -
Javi -
abrazos, tío.
Samuel -
Y conmigo, el tocino siempre tiene que ver...
Abrazos.
Javi -
Samuel -
Javi -
En cuanto a Potter, no le doy ni le quito más razón de la que tiene, sencillamente anda uno más desbocado que de costumbre y la tontada de las 6:30 fue la mecha que prendió la bomba. Poco más. Para mí no deja de ser muy triste que un adolescente sepa de memoria la talla de calzoncillo de Potter y ni siquiera sepa, en cambio, quién fue Long John Silver. Aunque supongo que eso es solo porque empiezo a estar chapado a la antigua...
Otro gran saludo para usted.
Hombre Lobo -
En todo caso, como le decía una vez a maese Yume, yo me cuento entre los fans del Potter por motivos que no vienen al caso porque serían demasiado largos para un comentario. Personalmente creo que uno está en el deber (a veces) de aprender a separar la obra literaria del fenómeno de masas, que al fin y al cabo, es fortuito (porque el éxito, aunque muchos digan lo contrario, no tiene fórmula alguna). Si no hiciéramos esto, imagínese cuantas grandes obras nos habríamos perdido.
Pero bueno, esto es más para una conversación no-virtual. Mi mayor propósito ahora mismo era celebrar su regreso, como siempre.
Un gran saludo.